Me levanté temprano a la mañana y algo me decía que tenía que ir a pescar tarus al San Roque.
No eran sólo ganas de pescar, era una sensación muy fuerte, casi incontrolable,
que nunca me había pasado. Consulto con la bruja y me dice que piense en otra cosa
que debe ser la abstinencia, que hacia ya una semana que no iba a pescar y era demasiado
tiempo. Consulto el pronóstico y a la noche se venía el cambio de tiempo. Es sabido que en los momentos previos
a los cambios de tiempo y tormentas (sobre todo las eléctricas) las tarus entran en su máximo nivel de actividad.
Me voy a trabajar pero la sensación seguía y pensaba en el cambio de tiempo y que era una oportunidad excelente para ir.
Almuerzo y al fin me decidí. Dejé todo. Busque los señuelos,
cargue la tanza en el reel, cambié algunos triples y partí para el San Roque. Primero hasta la
terminal de Cordoba y desde ahí a Carlos Paz. Me bajé cerca de la oficina de turismo de la villa
e intenté ir a visitar a los chicos del Delfin. Quise cortar camino y terminé debajo del puente Uruguay.
Ya me pareció un poco lejos asi que me encaminé al lugar de pesca. La semana pasada había visto un par de bahías lindas
cerca del polideportivo así que fui hasta esa zona.
Al llegar había un viento norte muy fuerte pero sabía que se "plancharía" pronto.
Comencé con una cuchara color cobre con pintas rojas Nº2. A pesar del viento había mucho pique. Pude sacar varias pero todas chicas, entre 30 y 35 cm. Mientras relojeaba el sur esperando que se forme la tormenta.
Adjunto:
DSCN6137.JPG
Pasadas las 18 el cielo se puso muy oscuro hacia el sur y el viento se cortó por completo. El agua se "planchó" y comenzaron
a saltar peces por todos lados, no solo tarus sino también carpas, pejes, mojarras. Todo bicho que andaba en el agua saltaba.
Era el momento que esperaba. Sigue mañana.....