Es cierto que el río año a año da muestras de recuperación, pero no lo dejan poner en pie... afortunadamente el dorado se mueve mucho y eso a veces hace que quede cierta población. como bien dice Dario, no es aun ni la sombra de lo que fue ni lo va a ser mientras no lo dejen. es un río muy chico para la presión de contaminación y pesca que soporta.
La mejor pesca de dorados que he hecho en mi vida fue en los bañados de paso de oscar, dos años antes de la mortandad....cuando el bañado llegaba a su punto mas alto de agua gran cantidad de doradillos, dorados y doradazos entraban detrás de las bogas, sábalos y bagres. Y no fue la mejor pesca solo por la cantidad o tamaños, si no por la forma de encarar la pesca...les cuento: entrabamos al bañado por el campo de un conocido que nos habíamos hecho...Domingo era su nombre. La pesca la hacíamos vadeando con el agua a la cintura, siguiendo los saltos de los dorados, los coletazos...en fin, las muestras de actividad...era cuestión de seguirlos...con tiros de 5 a 10 metros , no mas, veíamos las aletas amarillas en superficie y poníamos el moscazo por delante...los piques eran una explosión que te ponían la piel de lija ( de gallina nunca)---era tal la cantidad de dorados que 4 de 5 piques terminaban en corte...cada pique ocasionaba un terrible frenesí entre los demás peces y queriendo arrebatarle el bocado al que traías clavado te cortaban todo!! eran buenos dorados...me animo a decir que 4-5 kg en promedio... enfatizo " en promedio"...habia grandes de verdad.... pude ver, en una ocasión en medio de una terrible calma a unos 50 metros de donde me encontraba con el agua arriba de la cintura, como se originaba una terrible carnicería...delante de los coletazos y saltos de todo un frente dorado se adivinaba por el agite en el agua el huir de cientos de sábalos, bagres, bogas...un descontrol en serio.... se me vinieron encima. Solo atiné , ante el atávico temor de convertirse en eunuco, a agarrarme las pelotas y aguantar. todavía siento los coletazos de los que supongo eran sábalos y bogas, quizás carpas( aunque no recuerdo si en esa época ya había carpas como ahora en esa zona) que me pasaban golpeándome las piernas. No les puedo explicar el cagazo!!!! doy gracias a la vida y al dulce haber vivido ese tipo de cosas... así me enamore de santiago del estero...yo se que varios me entienden. Antes de conocerlos a ese señor Domingo, de una hospitalidad que solo he visto en Santiago, pescábamos en todo el desborde antes de llegar al puente del Utis en las correderas de una lado y del otro que se formaban simplemente por las alcantarillas que atraviesan el camino. caminábamos hasta verlos lomear o cazar...y a darle.... que tiene vida el dulce tiene...pero como dice Dario, lamentablemente, ni una sombra de lo que fue. Se me piantò un lagrimon.
_________________ "desenganchado de mil anzuelos"
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